“Donde no hay justicia no hay sociedad que tenga paz”

Entrevista al abogado Carlos Bozzi, sobreviviente de “La noche de las Corbatas”, en el marco del Día Nacional del Abogado Victima de Terrorismo de Estado.

Carlos Bozzi es abogado laboralista. Se recibió en la Universidad Católica de Mar del Plata en 1975 y se dedicó al derecho laboral junto a su socio Tomás José Fresneda, desaparecido hasta el día de hoy.

Durante los días 6 al 8 de julio de 1977, 6 abogados fueron secuestrados en la ciudad de Mar del Plata junto a familiares en lo que hoy se conoce como “La Noche de las Corbatas”. Carlos prestó testimonio para la Facultad y abordó qué fue lo que sucedió durante este acontecimiento siniestro.

“Esos días fueron de terror y pánico. Con el Dr. Fresneda (detenido desaparecido) nos enteramos del secuestro de los primeros 4 abogados el día 6 de julio a la tarde, porque en esos momentos había una edición vespertina del diario El Atlántico de Mar del Plata”, expresó Bozzi.

“Entre ellos, fue secuestrado el Dr. Norberto Centeno, quien fuera el autor de la Ley de Contrato de Trabajo. Posteriormente se secuestró a la esposa del Dr. Fresneda que estaba embarazada. El 13 de junio se secuestraron a 3 personas más”, continuó con el relato.

A 47 años del suceso, el abogado Bozzi, quien además es autor de varios libros y publicaciones que relatan este acontecimiento, recordó “era una persecución ideológica porque este grupo de abogados impugnaba la reformas efectuadas a la Ley 27.644 de Contrato de Trabajo, por el Proceso de Reorganización Nacional. Especialmente se cuestionaba judicialmente dentro de los juicios laborales la modificación de la forma de pagar la indemnización al trabajador despedido. El antiguo texto de la Ley debía actualizarse conforme al costo de vida pero por una decisión del ministro de economía de la nación de ese momento, Martínez de Hoz, en la reforma se estableció una forma de indemnización totalmente injusta al trabajador”.

A fines de la década de los 90 comienzan a surgir los Juicios por la Verdad: “La reconstrucción de los hechos y el enjuiciamiento a los responsables tardó desde el año 77’ hasta el año 2010, que en realidad tampoco se enjuiciaron sino que ahí comenzó en Mar del Plata el Juicio por la Verdad, que era un juicio que no tiene condena sino que es un juicio para establecer responsabilidades de quienes hubiesen cometidos delitos ilícitos amparados en el poder del Estado y que presenten testimonio, como así también las víctimas”, agregó Carlos.

C.B: “El Juicio por la Verdad fue un juicio monumental en la ciudad, en donde se reunieron más de 300 a 400 testimonios. Ningún represor ni acusado de delito quiso prestar declaración amparándose en la garantía constitucional. Este juicio sirvió de base para los posteriores juicios orales llevando a la condena a los principales responsables de lo que se llamó “la noche de las corbatas”. Hay que recordar que este acontecimiento involucró a 11 personas de las cuáles solo 4 sobrevivieron, y las otras 7 más el bebé de la señora de Fresneda, siguen desaparecidas”.

¿Cuál consideras que es la mejor forma de mantener viva la memoria?

C.B: «En mi opinión, es necesario continuar en la investigación de los hechos que no están aclarados debidamente. No están aclarados en sus responsables materiales. Si fueron condenados sus responsables superiores, pero los responsables materiales, aquellos que apretaron el gatillo y asesinaron a los abogados, que sus cuerpos aún no han sido recuperados, esos hechos no están esclarecidos. Acá tenemos en vez de un nunca más, un nunca lo sabrás. Es un trabajo muy difícil que más allá de la memoria exige investigación y dedicación. Quizá también, un manejo distinto de la instrucción para indagar más a fondo de todo lo que se hizo en el Juicio por la Verdad y en los juicios orales que involucran a la Cueva I, la Cueva II y la Cueva III».

¿Qué trabajo tiene la justicia y los profesionales del derecho para defender la democracia?

C.B: «El trabajo que tienen es muy arduo, enorme. Los profesionales del derecho para defender la democracia tienen que luchar contra una administración de justicia que a veces no es lo suficientemente ecuánime. Hay fallos hasta de la Corte Suprema que no son claros, que no defienden los derechos de las personas ni los derechos humanos. En fin, el ejercicio de la profesión exige luchar por la justicia, porque donde no hay justicia no hay sociedad que tenga paz».

¿Cuáles creés que son los reclamos pendientes?

C.B: «Los reclamos pendientes en la sociedad son muchos. Se ha avanzado evidentemente en muchos aspectos pero quedan muchos reclamos pendientes. Desigualdad de proporción de situaciones, de derechos, situaciones de los más débiles y desprotegidos de la sociedad. Derecho a la vivienda, derecho a la alimentación. Derecho a tener una justa jubilación. Los reclamos pendientes son los reclamos pendientes de la democracia. Es decir, todos aquellos problemas que nuestras democracias no han podido resolver».